Sunday, August 10, 2008

Calma total 2

l: 36º 07'N
L: 04º 01,3'W
Dist.recorrida: 4313'
Viento: NE 1,5 nudos
Rumbo 55º

El paso del estrecho a vela resultó de lo mas interesante, si bien
tuvimos suerte con el viento, que aunque soplaba del E, fué lo
suficientemente flojito como para permitirnos pasar sin mayor
dificultad.
Escogimos la Zona de Navegación Costera pegada a la costa de Cádiz
para tratar de reducir al mínimo los encuentros con el siempre intenso
tráfico del estrecho; y tener mejor resguardo de un posible viento
duro del E. En apenas 20 millas, tuvimos cuatro sucesivas condiciones
de mar muy distintas. De un mar como un espejo frente a las playas de
Bolonia a una brusca marejada al doblar Punta Tarifa, que
paulatinamente cayó a marejadilla, para volvernos a encontrar una mar
plana pasada Punta Europa
En Tarifa nos esperaba Borja, encaramado a la luz verde del malecon
del puerto, para poder hacer mejores fotos. El Badum llevaba tanta
arrancada que seguro que las fotos han salido movidas ...
Desafortunadamente, no pudimos parar para tomarnos una cerveza con él,
como nos hubiera gustado, y apenas nos dio tiempo para lanzarle unas
latas de alcachofas, de las que seguro habrá ya dado buena cuenta,
recordando tiempos recientes.
Tras sortear varios rápidos de las líneas Algeciras-Ceuta y
Algeciras-Tanger (que imponen bastante) llegamos a Gibraltar, donde
naturalmente pusimos una bandera española en la banda de babor y
lanzamos a coro el grito que ha sido lema durante la travesía:
"gibrazta ezpaño", y que las baterías de costa del Peñón no se
atrevieron a responder adecuadamente para no atenerse a las
consecuencias ...
Inmediatamente tuvimos que maniobrar para sortear el área de trabajos
de rescate de los restos del New Flame, hundido a los pies del Peñón y
con una par de grandes grúas en superficie y, suponemos, unos cuantos
buzos cortando sus chapas en el fondo.
A partir de ahí y con rumbo ya hacia el Cabo de Gata, el viento empezó
a caer hasta los 0,5-1 nudos lo que nos ha obligado a poner motor,
situación en la que continuamos.
El mar está increíblemente plano (Juan dice que hay mas olas en un
estanque) y avistamos delfines de forma continuada, todos nadando
hacia el Sur, lo que nos mosquea un tanto. Algunos se detienen a jugar
con el barco y otros nos ignoran y continúan su camino pegando saltos
para darse "chapuzones de aire" Hoy ya estamos cansados de delfines y
tampoco les hacemos caso.
La puesta del sol, una ve mas, espectacular, a pesar de ponerse tras
los montes de Marbella. La noche promet

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